El Dicasterio para la Cultura y Educación del Vaticano se ha vinculado al Centro Markkula de Ética Aplicada de la Universidad de Santa Clara y el resultado ha sido un libro con pautas para el uso de la Inteligencia Artificial (IA). Se trata de una obra que algunos medios han querido calificar como el “manual del Vaticano para la IA”.
El libro se llama ‘Ethics in the Age of Disruptive Technologies: An Operational Roadmap’ (algo así como ‘Ética en la era de las tecnologías disruptivas: una hoja de ruta operativa’) y de hecho la obra está online. Se ha ocupado de publicarla el Instituto de Tecnología, Ética y Cultura (ITEC), realidad surgida de la asociación entre el Vaticano y el centro de la Universidad de Santa Clara.
“Este libro pretende brindar orientación para los esfuerzos de ética pero no pretende funcionar como asesoramiento legal o asesoramiento de gestión”, dicen los autores, los cuales también refieren que “como centro de ética estamos entregando un documento donde brindamos los conceptos y marcos éticos, mientras que las organizaciones aplican su propia gestión y legal.
Los autores del Manual (José Roger Flahaux, Brian Patrick Green y Ann Gregg Skeet) recuerdan en el Prefacio que “Los líderes quieren lo mejor para su organización”. Pero también recuerdan que “El liderazgo requiere conocimientos, una visión clara, buen juicio, los recursos adecuados y no dejar nada al azar. Y dentro de esas categorías hay otra, la base no sólo de la buena práctica empresarial, sino de toda la sociedad humana: la ética. La ética es la base sobre la que la gente construye todo lo demás. Las buenas relaciones éticas generan confianza, y la confianza es el fundamento de toda institución social. Sin ella, las relaciones se desmoronan, y si se desmoronan suficientes relaciones sociales, ya no se vive en una sociedad, sino en la anarquía”.
Los autores señalan que “Aunque este libro no pretende abordar cuestiones sociales a tan gran escala, sí aborda directamente una de las palancas de poder más importantes de la sociedad: las empresas y otras organizaciones que desarrollan o trabajan con tecnologías avanzadas. Si algunas empresas y sus tecnologías perjudican a la sociedad, ésta se degradará, y si un número suficiente de empresas y sus tecnologías ayudan a la sociedad, ésta mejorará”. Por eso recuerdan que “Los líderes empresariales no son sólo líderes empresariales, sino también líderes destacados en la sociedad. Dependiendo de cómo actúen, se les admira o se les denigra. Sus acciones están fundamentalmente ligadas a la ética y marcan la pauta para su segmento de la sociedad. Y, sin embargo, si las decisiones de los líderes empresariales son tan vitales para el bienestar de la sociedad, ¿por qué habría alguno de tomar decisiones desalineadas con este objetivo? Hay muchas razones, pero una de ellas es la simple falta de concienciación y conocimiento sobre cómo establecer el tono ético adecuado en toda la organización y hacer operativo el pensamiento ético en todos los procesos de forma que las malas decisiones sean menos comunes y, con suerte, bastante raras”.
Finalmente, Flahaux, Green y Skeet ponen delante el propósito del Manual: “capacitar a los líderes empresariales y ayudarles a realizar un cambio positivo en sus empresas, con el plan, las herramientas y los recursos que necesitan para poner en práctica estos cambios para el bien común. Lo presentamos buscando continuar un diálogo e invitamos a responder. La ética nunca es una obra acabada, por lo que este manual también evolucionará con el tiempo. Esperamos sus opiniones”.